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martes, 30 de octubre de 2012

Quizás cuando muera no muera.




Quizás cuando muera no muera

No me vaya del todo hacia la nada

Porque vivo resucitando cada noche

Quizás cuando escribo estoy más loco

Más loco que siempre, más loco que el jueves

Porque tengo esquirlas de nostalgias en el cuore

Tengo en mis pestañas lágrimas pegadas

Hoy es lunes y creo que ni con miel lo transformo en viernes

Quizás cuando muera sea en viernes

Como para no pensar en un fin de semana sin ti

Pero cómo escapar a los ojos que te buscan sin descanso

Caminando sin suelas, sin pasos, solo arrastrando la soledad

Esta es otra noche de aquellas que siempre me pasa

De las que no tengo gusto a besos en los labios

Esas noches que dan lástima, solo hay dejos de caricias muertas

A quién decirle un piropo con la mirada?

A quién acariciar los hombros cansados, delgados y fríos?

A quién rozar la espalda dibujando el bretel fantasma?

A quién besar por encima de las rodillas?

A quién le digo que quizás cuando muera no muera?

Si muero cada vez que no estás

Si vivo solo por los recuerdos de esta resaca de nostalgia.




Char…libre, sin registro©

viernes, 26 de octubre de 2012

¿cuántas noches más como ésta?





Los calendarios con sus días,

los locos con sus locuras,

los miedos a la espesura,

de soledad despiadada.

No me digas nada, cuando me veas callado,

es que en mi mirar cansado

solo veo tu mirada, aguda, clavada,

en mis ojos perforados de madrugadas.

Siempre me estoy yendo porque jamás me quedo,

no tengo lugar porque siempre busco y no encuentro,

mis deseos se hacen palabras con letras de tu nombre

y vuelan al mar, vuelan al norte, vuelan visibles, jamás se esconden.

Así es mi vida o lo que palpita en mi adentro,

melodías locas sin sonetos, sin coros ni libretos,

es una maraña clásicamente loca cabalgante,

como mis besos en tus labios de amante…

No te encuentro en el mar, te veo en la luna,

y se despiertan caricias en tus nalgas desnudas,

cogidos de la mano, sentados desnudos  en la bruma

nos miramos en la noche de penumbras.

Nos baña la espuma y cubre de arena

de un mar imaginario, de un mar de estrellas,

dos cuerpos desnudos  de adentro hacia afuera

quedarán allí con aroma a sexo en la carne perpetua

y el amor profundo permanecerá en el aire

en el aire puro de cada mañana cualquiera

cuando despierte y te encuentre

en el cielo de mis sábanas negras.

Después mi mirada te dibujará en el techo,

en el cielo raso gastado de sueños

serás en la mancha de humedad

el brillo mezclado de tus ojos

y la curvatura de tus piernas perfectas.

en mi ventanal vive tu espalda y mis caricias

y en tus pechos dulces, naturales, el interrogante,

¿Cuántas noches más como ésta?




Char…libre, sin registro©

domingo, 21 de octubre de 2012

Me quema una pregunta...




Hoy fue el primer día.

Parecía interminable,

y sin embargo ya termina,

lento, suave, doloroso, oscuro,

mientras sigo construyendo sueños,

deseos imposibles y castillos de caricias,

todo efímero, todo muerto…menos el recuerdo.

Me siento agotado y esperando una señal,

la señal que seguro tienes para mí

guardada en un rincón del cielo.

Solo me queda quemando una pregunta

¿a quién le doy hoy mis besos…?

¿a quién le digo feliz día mamá?

Seguro que volaré con mi locura en aumento

y besaré aquella estrella, la que más brilla,

la que me ilumina en esta soledad de hombre niño herido,

que a pesar de los cuarenta y nueve,

a pesar de eso no comprende tu ausencia.

Ya no tengo rimas, no tengo aliento,

mejor me marcho a la raíz, a mi adentro,

a recordarte con tu mejor sonrisa,

a deleitar mi alma con el perfume de lo que quedó

de aquellas caricias y esos besos eternos.




Char…libre, sin registro©

viernes, 19 de octubre de 2012

Primero eso...después muero.




Todo el silencio se recopiló en un suspiro.

Pensé pedirle al destino que me ausente.

Quizás mi mente huele a muerte, a soledad creciente.

Miré hacia los muros gastados por la indiferencia,

mi corazón late igual a ellos, constante, sin licencias.

Como hojas coloradas colgando a la nada gotea mi sangre

me baña el alma y el cuerpo entero, tengo frío y sueño.

Un ángel mudo me hace un guiño, cierro mis ojos

todo es rojo…como tus labios cuando besaban mis ojos.

Antes del último suspiro sé que te necesito,

primero eso…después muero.

Déjame soñar en las nubes con tu amor eterno.

Vuélveme a la vida con tres caricias y dos besos,

despiértame con tu aliento de fuego

Tengo frío, no te tengo.

No quiero morir, quiero la chance última de tu cuerpo

Deja navegar mi lengua en tus caderas

Déjame remar mis manos hasta tus pechos

Me basta el mundo de tu ombligo

Para descubrir tu universo.




Char…libre, sin registro©

martes, 16 de octubre de 2012

¿Qué late en ti?





Cómo decirte que vivo en las nubes.

Parezco adormecido por todos los besos que se puedan contar.

Solo dime cariño qué debo hacer  para volver a ser yo mismo.

Estoy seguro que tienes  amor guardado y esperando

más no puedo llegar al sendero de tus pechos,

solo sé que no dejaré escapar el secreto de sentir,

de vibrar por lo desconocido.

Todo a mi alrededor pretende más y más.

Construí miles de estrellas rojas y lunas verdes,

esperanza y pasión…pero no alcanzó.

Amo la libertad, la forma de mujer,

amo los silencios, las miradas sin tiempo,

los suspiros sin reproches, las pasiones,

las soledades eternas junto a ti.

Amo tu ser, tu esencia, mi desesperación.

¿Qué cosa misterios mora en tu corazón?

Tantas cuestiones sin respuestas,

y este puto destino que destroza mi amor.



Char…libre, sin registro©

lunes, 8 de octubre de 2012

Te buscaba en el río.




Cuando cantaban los pájaros a orilla del río

las nubes flotaban al ritmo de saltos de grillos.

El viento y la arena confundían sonidos,

silbidos sobre el agua tan finos como hilos,

mi mirada se perdía en el resplandor fundido,

de un sol que se apagaba en la tarde de río.

El remanso acunaba las ramas del sauce

y lloraba su savia derramada en el cauce.

Fue hoy a la tarde cuando a orillas del río

buscaba algo tuyo, algo que me de alivio

porque me quema aceptar que hayas partido,

que hayas muerto y me queden besos dormidos

abandonados en mis labios fríos.

Ahora que llega tu día, todos mis días serán un delirio.

En trece días venideros seré un hombre sombrío,

con caricias huérfanas y besos mordidos,

que sangrarán en mi boca temblando…

por no tener destino, mi destino está dicho.

Tú te has muerto madre, tu corazón en mí sigue vivo.




Char…libre, sin registro©

miércoles, 3 de octubre de 2012

Sin punto de apoyo.



No queda punto de apoyo.

No hay mas que saltar en un pie

como saltan los cojos.

Cuando la noche invade y trepa,

como lo hace el abrojo…

enmaraña a mi corazón viejo y loco.

Faltan tantas horas para ver el sol,

como horas para dormir mi sueño de amor.

Quizás mañana con el aroma de rocío

pueda imaginarte nuevamente,

sentada en mis piernas,

dormida conmigo, mis manos en tu falda

y en tu boca mis mordiscos.

Quizás mis piernas no soporten ni tu sombra

y en la lejanía del no poder sentirnos,

tu cuerpo esparcido en almohadones vacíos

transpiren la necesidad de mi piel

que se deshidrata en soledad

sin el sabor de tus besos de miel.

No queda punto de apoyo

cuando a dos manos tratamos de remar en la arena

en la tierra de una condena escrita con sangre de soledad.

Solo queda a veces la posibilidad de saltar en un pie

esquivando pozos, abismos casi eternos,

que ven pasar nuestras miradas perdidas

buscando dónde acomodar el corazón  

para entibiar el alma en tiempos de amor.





Char…libre, sin registro©