Una noche como tantas
Con rocío de estrellas
Ella se congela en la nada
Vive su mundo, desolada
Rasguñando pesadillas de besos descarnados
Que agrietaron sus labios frambuesa
Esos labios con sabor a tristeza
Donde muere la sonrisa
Donde ya no existen caricias
Porque se esfumaron con el tiempo
Y ella ni siquiera piensa
Solo acude a su soledad de princesa
Puta realidad de tantas mujeres solas
Esperando encontrar una salida
Florecer entre sábanas tibias
Destilar amor guardado
Sin prejuicios, ni a escondidas.
Char®
Que triste tu poema pero qué intenso.
ResponderEliminarUn placer leerte.
Un besazo.