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martes, 3 de abril de 2012

El colapso de la civilización del miedo.(Enric Soria)



Por miedo al caos se imponen todo tipo de formas de gobierno deshumanizadas y autoritarias.
Por miedo a no conseguir un trabajo debemos luchar y conseguir títulos universitarios y masters.
Por miedo a no tener alguien cerca con quien compartir la vida se formalizan contratos de matrimonio y se condena su disolución.
Por miedo a la escasez del mañana se vive ahorrando y acumulando.
Por miedo a perder lo ahorrado nació el sistema bancario.
Por miedo a la jubilación llegaron los planes de pensiones.
Incluso por miedo a no tener un techo bajo el que dormir muchas personas hipotecaron los siguientes treinta años de su vida.
Por miedo a quedarse sin trabajo se aceptan las condiciones de la esclavitud.
Por miedo al mañana se decide renunciar al hoy.
Por miedo al exterior se levantan todo tipo de murallas y nos recluimos en nuestras cárceles de aislamiento particulares.
Por miedo al extranjero proliferan las armas, los ejércitos y las guerras.
Por miedo se nos dijo que la mejor defensa, es un buen ataque.
Hoy sé que la única defensa es un buen entendimiento.
Sólo el amor es vida, mientras que el miedo se disfraza de protector siendo la muerte.
Pues todo es amor y todo es vida, y el miedo es tan sólo ausencia de amor. Falta de vida.
El miedo paraliza, mientras que el amor sabe que todo es movimiento.
El miedo se aferra al cambio. El amor sabe que todo cambia. Todo está en permanente transformación, sujeto a la ley de la evolución.
El miedo vive en la negación y deforma la realidad, mientras que el amor todo lo acepta con serenidad.
El miedo retiene. El amor deja marchar.
El miedo culpa. El amor todo lo perdona, pues todo lo entiende.
El miedo es una pesada carga, mientras que el amor es ligero como el aire.
El miedo asfixia y aprisiona. El amor libera y oxigena.
El miedo es rígido como el hielo, mientras que el amor es flexible y fluye como el agua.
El miedo es frío, mientras que el amor es cálido.
El miedo se resquebraja y contrae como la tierra seca. El amor se expande.
El miedo desequilibra, mientras que el amor equilibra, ya que sabe que todo cuanto existe está en equilibrio de fuerzas.
El miedo es enfermedad. El amor es salud.
El miedo es envejecimiento. El amor es juventud.
El miedo golpea, mientras que el amor acaricia.
El miedo es insensible, mientras que el amor es sensibilidad.
El miedo sólo ve problemas. El amor tiene la inocencia de un niño.
El miedo divide. El amor integra.
El miedo grita, mientras que el amor habla con tacto.
El miedo destruye, mientras que el amor construye.
El miedo ve justificadas hasta las peores atrocidades, mientras que el amor se compadece del miedo y le muestra el camino.
El miedo es extremadamente serio y ve la vida como una competición de vida o muerte. El amor es alegre, pues sabe que la vida sólo tiene sentido cuando se vive como un juego.
El miedo vive preocupado por el futuro y atrapado en el pasado. El amor acepta el pasado como parte necesaria en su evolución y vive el presente.
El miedo necesita, pues se siente incompleto. El amor no actúa por necesidad, pues sabe que ya es completo; tan sólo disfruta de los regalos que le brinda la vida.
El miedo es dependiente, pues no cree en sí mismo ni tampoco en los demás. El amor cree en él mismo y, consciente de que su esencia está presente en todo, también cree en los demás.
El miedo siempre espera algo a cambio. El amor simplemente comparte de forma incondicional.
El miedo vive pensando en recoger. El amor disfruta sembrando.
El miedo acumula avariciosamente y nunca tiene suficiente. El amor sabe que no puede tener más de lo que ya tiene: a él mismo.
El miedo manipula nuestra mente y no nos deja ver la verdad, cubriéndola con un oscuro velo que nos mantiene ciegos. El amor expande nuestros sentidos y nos muestra un nuevo mundo lleno de luz y de color.
El miedo nos resquebraja por dentro desde nuestra oculta pero real dimensión interior para equilibrar la fuerza de atracción gravitatoria que ejerce sobre lo exterior. El amor nos compacta y fortalece por dentro, para equilibrar la fuerza con la que da e ilumina el exterior.
El miedo desconfía de la vida y vive en permanente lucha. El amor confía en la vida, pues es consciente de que la vida y él son la misma cosa.
Sencillamente del miedo procede toda semilla de infelicidad, mientras que sólo a través del amor puede existir felicidad y lograrse descubrir el mayor de los tesoros.
El miedo vive en nosotros mientras vivamos identificados con lo irreal, aferrados a fantasías, o inmersos en la ilusión de las formas y las apariencias de esa cáscara exterior que todo lo recubre. El amor y la verdad son revelados cuando decidimos profundizar y alcanzamos la esencia que hay en el núcleo interior de todos nosotros. Pero también cada vez que no pensamos ni nos identificamos con nada, y en lugar de eso tan sólo escuchamos a nuestro corazón y simplemente SOMOS.
Cada paso que damos movidos por el miedo, no importa cual sea la dirección, es un trozo de nuestra vida al que hemos renunciado. El miedo tan sólo es como una habitación oscura de nuestra casa pidiendo ser iluminada con la luz del entendimiento de nuestra conciencia, y cuando, tras una larga huida, nos encontramos acurrucados en el último rincón de la casa rodeados de oscuridad tan sólo queda una opción: levantarse y comenzar a encender luces.
Todo es parte de un ciclo sin fin de expansión y contracción, como un gran corazón latente del que todos formamos parte, y donde, cuando todo parece perdido, un nuevo latido de amor nos devuelve la conciencia de nuevo a la vida.

5 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo amigo...buen comienzo de semana besos

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  2. Comparto todo lo expuesto en tu poema,sólo que la vida real está tejida con hilos de miedos y tenemos que estar preparados para que esos hilos no se aferren a nuestro cuello y nos ahorquen,de ahí los miedos.
    Y es muy cierto,el amor es la solución.Lástima que sólo lo sepamos unos cuantos poetas soñadores.

    Gran poema Charly.

    Saludos cordiales.

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  3. Hola Char, leí atentamente tu entrada y es maravillosa.
    Desde mi humilde opinión diría que el miedo es un virus que cualquiera está propenso a pezcarlo, entra al organismo y te paraliza.
    En algunas ocasiones es destructivo y en otras te advierte que algo estás haciendo mal y te ayuda a retroceder.
    Y el amor...el amor es un sentimiento que muy pocas veces aparece con la intensidad que viste, cuando llega es como una droga, totalmente adictivo y hasta te sorprende sus secuelas.
    Abrazos enormes mi querido amigo, bella semana........se feliz!

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  4. El amor es un sentimiento maravilloso, se siembra en el surco de los corazones, se alimenta de verdades, crecen sus raíces en la fértil tierra, se hace arbol frondoso y en sus ramas se mece al viento el alma en libertad.

    Mayra


    Precioso post, Char.

    Mi siempre abrazo.

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  5. Que dificil es vivir con miedo, a vivir, a lanzarte a por lo que quieres, a luchar en fin el que no se arriesga jamas sabra afrontar ese miedo que paraliza y no le deja ir en busca de lo que anhela.
    Besos

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